Tel Aviv, 18 sep (Sputnik).- La agencia de espionaje israelí Mosad colocó explosivos en 5.000 mensáfonos importados por la organización chiita libanesa Hizbulá meses antes de las detonaciones de ayer que mataron a 9 e hirieron a miles, según informó una fuente de seguridad libanesa de alto rango y recogió Al Arabiya.
«El Mosad inyectó una placa dentro del dispositivo que tiene material explosivo que recibe un código. Es muy difícil detectarlo», dijo la fuente.
Es decir, que según la fuente, los dispositivos habían sido modificados «en el nivel de producción».
La fuente dijo que 3.000 de los mensáfonos explotaron cuando se les envió un mensaje codificado, activando simultáneamente los explosivos.
La fuente de seguridad libanesa dijo que los dispositivos eran de la compañía Gold Apollo, con sede en Taiwán, pero la compañía respondió que no fabricaba los dispositivos sino que los hacía una firma europea con derecho a usar su marca.
Los mensáfonos habían sido traídos a Líbano a principios de este año, según varias fuentes.
Los miembros de Hizbulá han estado utilizando mensáfonos como un medio de comunicación de baja tecnología en un intento de evitar que los israelíes los ubiquen, según los analistas.
Alrededor de 170 miembros de la organización han muerto en ataques israelíes selectivos en El Líbano, entre ellos un alto comandante y un alto funcionario de Hamás en Beirut.
En un discurso televisado el pasado 13 de febrero, el secretario general de Hizbulá, Hasán Nasrala, advirtió a sus filas que sus teléfonos celulares eran más peligrosos que los espías israelíes y dijo que debían romperlos, enterrarlos o encerrarlos en una caja de hierro.
Así, el grupo optó por distribuir mensáfonos a todos los miembros, desde los combatientes hasta los médicos. (Sputnik)