Los sindicatos médicos de toda España se manifiestan ante Sanidad para exigir un estatuto propio

elInternacionalista
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Madrid (EFE).- Sindicatos médicos de toda España se concentran este jueves ante las puertas del Ministerio de Sanidad para mostrar su rechazo frontal al borrador del estatuto marco de Sanidad, que creen que atropella sus condiciones laborales, y para pedir una regulación propia para la profesión médica.

«Por un estatuto propio de la profesión médica y facultativa» es el lema que han elegido las ocho organizaciones convocantes para materializar sus protestas ante lo que consideran «un atropello» de Sanidad a sus condiciones laborales y ante su negativa a reconocerles un convenio propio fuera del estatuto marco, que afecta al conjunto de trabajadores del Sistema Nacional de Salud, sanitarios y no sanitarios.

En concreto, la concentración ha sido convocada por CESM (Confederación Española de Sindicatos Médicos), conformado por más de una decena de organizaciones autonómicas; el Sindicato Médico Andaluz (SMA); Metges de Catalunya; la Asociación de Médicos y Titulados Superiores (Amyts); el Sindicato Médico de Euskadi (SME) y de Navarra (SMN); el Sindicato de facultativos de Galicia independientes Omega y el Sindicato de Empleados Médicos de Canarias (Semca).

Cuenta, además con las adhesiones de Sime-CSIT Unión profesional; el Sindicato de Médicas y Médicos de Atención Primaria (SMP); la Asociación MIR España (AME); la Asociación Avanza Médica (AM) y la Asociación de Médicos Unidos por sus Derechos (MUD).

A ella acudirán no solo delegados sindicales, también representantes de los colegios de médicos y organizaciones representativas y profesionales de todo el territorio nacional.

La ministra defiende un capítulo propio dentro del estatuto común

La titular de Sanidad, Mónica García, ha afirmado que, como médica, «empatiza» con sus compañeros que van a concentrase contra el borrador de estatuto marco, pero ha puntualizado que sus malestares caben en un capítulo propio dentro del texto común al resto de profesionales del Sistema Nacional de Salud.

En una entrevista con RNE, Mónica García ha dicho comprender las «reticencias» que hay sobre el borrador, pero «lo peor» sería tener que quedarse con el estatuto vigente, que data de 2003, y que es el origen de «muchos de los malestares» que expresan actualmente sus colegas de profesión.

Ha apelado a entender que también es ministra «no solamente de los médicos, también de enfermeros, auxiliares, investigadores, celadores, y además, la ministra que tiene que velar por el Sistema Nacional de Salud».

De ahí que no comparta una regulación específica para los facultativos: «diferenciar, segregar o atomizar este estatuto sería volver a los años 70. Separar a unos profesionales de otros significaría sacarles de la Función Pública», ha explicado.

En lo que sí cree es en un capítulo propio, siempre dentro del general, que reconozca las particularidades de los médicos porque sus jornadas, que implican guardias, son diferentes a las del resto.

Contra el borrador del estatuto marco

El borrador del estatuto marco ha enfrentado al Ministerio con la profesión médica porque esta cree que merma sus ya «precarias» condiciones, mientras que Sanidad defiende que las mejora al reducir la inestabilidad y las horas de guardia y reconoce a sus profesionales como autoridad pública.

Las fricciones por el documento han ido en aumento en los últimos días hasta el punto de que el pasado miércoles, Sanidad lanzó un documento sobre ‘Preguntas frecuentes sobre el estatuto marco’ en el que rebatía muchas de las afirmaciones vertidas por los sindicatos médicos. «Frente a bulos, desinformaciones y malentendidos, desde el Ministerio resolvemos las dudas», enfatizó la ministra Mónica García en sus redes.

Una de las medidas que más ampollas ha provocado es el régimen de incompatibilidades, que impediría a los jefes de servicio y otros mandos intermedios compatibilizar el ejercicio en la sanidad pública y en la privada, aunque percibiendo un complemento retributivo específico por la exclusividad.

Sanidad cree que solo así se puede asegurar un «desempeño ético» de estas funciones y evitar los conflictos de interés, pero los facultativos se quejan de que prácticamente solo les afecta a ellos y que dará pie a la fuga de talento.

Negociaciones suspendidas

Las protestas de los facultativos deberían haber coincidido con una nueva reunión del ámbito de la negociación del estatuto marco entre Sanidad y el conjunto de organizaciones sindicales que participan en el proceso.

Sin embargo, este encuentro tuvo que suspenderse por falta de cuórum ante la negativa de los sindicatos más representativos de esa mesa -CSIF, FSES, CCOO, UGT y CIG Saude- a proseguir con el diálogo hasta que la ministra de Sanidad, Mónica García, no les reciba de manera urgente para reconducirlo.

Estos sindicatos, molestos porque consideran que se ha desvirtuado el debate ante la situación creada por el propio Ministerio y «la exposición mediática creada y mantenida en el tiempo» sobre el texto, quieren «establecer y aclarar los términos en los que se debe llevar la negociación».

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