Pekín, 16 may (Sputnik).- Los presidentes de Rusia y China, Vladímir Putin y Xi Jinping, resaltaron la importancia del diálogo para resolver la crisis ucraniana e instaron a prevenir que derive hacia una fase descontrolada.
«Las partes señalan la necesidad de cesar cualquier acción que contribuya a la prolongación de las hostilidades y a una mayor escalada del conflicto, exhortan a evitar su transición a una fase descontrolada y enfatizan la importancia del diálogo como la forma óptima de resolver la crisis ucraniana», dice la Declaración Conjunta publicada este jueves al término de las negociaciones de Putin y Xi en Pekín.
El documento deja constancia de que Moscú «valora positivamente la postura objetiva e imparcial de China hacia la cuestión ucraniana y comparte el planteamiento de que los conflictos han de resolverse en base a la Carta de las Naciones Unidas en su cabalidad y totalidad».
«La parte rusa saluda la disposición de la parte china para desempeñar un papel constructivo para una solución política y diplomática de la crisis ucraniana», dice la Declaración.
Moscú califica iniciativa china sobre Ucrania de la más realista de todas
La iniciativa de China sobre Ucrania es la más realista ya que busca eliminar la causa raíz del conflicto, declaró este jueves el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov.
«La iniciativa (china) es la más realista porque se centra en la necesidad de comprender las causas fundamentales (del conflicto) y eliminarlas», señaló Lavrov al periódico Izvestia.
El jefe de la diplomacia rusa destacó que Moscú nunca ha pedido a Pekín que modifique su iniciativa.
«Proponemos iniciar una conversación basada en la parte clave de la iniciativa china y abordar las causas fundamentales», indicó.
China sostiene que las negociaciones son la única manera real de solucionar la crisis ucraniana y defiende una serie de principios clave en este sentido, particularmente evitar la extensión de las hostilidades a terceros países y su involucramiento en el conflicto, evitar la escalada de operaciones bélicas, no utilizar armas de destrucción masiva, ante todo nucleares y biológicas, abstenerse de ataques a la población civil y a instalaciones nucleares, así como evitar declaraciones y acciones que alejan la perspectiva de un alto el fuego.
El pasado 9 de abril, el canciller chino, Wang Yi, expresó la esperanza de que las hostilidades en Ucrania cesen lo más temprano posible. Wang reafirmó que China procura el pronto restablecimiento de la paz y la estabilidad en el continente europeo y seguirá desempeñando un papel constructivo con ese fin. En particular, Pekín avala la convocatoria a su debido tiempo de una conferencia de paz internacional que sea reconocida tanto por Rusia como por Ucrania y garantice la participación equitativa de todas las partes y debates justos sobre todos los planes de paz.
El 13 de mayo, el portavoz de la Cancillería china Wang Wenbin dijo que Pekín considera necesario «enfriar la situación» en torno a Ucrania como un primer paso para resolver la crisis actual, y que este planteamiento cuenta con el apoyo de otros países, particularmente Turquía, Egipto, Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos.
Rusia continúa desde el 24 de febrero de 2022 una operación militar especial en Ucrania, cuyos objetivos, según el presidente ruso, son proteger a la población de «un genocidio por parte del régimen de Kiev» y atajar los riesgos de seguridad nacional que representa el avance de la OTAN hacia el este.
Hasta la fecha, Ucrania ha condicionado el cese de las hostilidades a la recuperación de todos los territorios, incluida Crimea, que se unió a Rusia en marzo de 2014.
La última ronda de conversaciones entre Moscú y Kiev para lograr un acuerdo de fin de las hostilidades, tuvo lugar el 29 de marzo de 2022 en la ciudad turca de Estambul, y desde entonces los países no han vuelto a retomarlas.
El conflicto de Ucrania, según el Kremlin, puede avanzar hacia una solución política siempre y cuando se tenga en cuenta la nueva realidad territorial y se cumplan las garantías de seguridad en las que insiste Moscú.
En diciembre pasado, Putin afirmó que la operación continuará hasta que Rusia logre la desnazificación, la desmilitarización y la neutralidad de Ucrania.