Moscú, 14 ago (Sputnik).- El embajador ruso en el Reino Unido, Andréi Kelin, advirtió que el Gobierno de este país monárquico seguirá incitando el conflicto ucraniano independientemente de quien gane las elecciones de noviembre en Estados Unidos.
“El Reino Unido es uno de los principales incitadores del conflicto desde su comienzo. Los propios altos cargos británicos dicen de su país que es la locomotora que lidera el campo occidental (…) Es evidente que Londres quisiera seguir con este rol, al menos de palabra, independientemente de los resultados de las elecciones presidenciales en Estados Unidos”, dijo Kelin a Sputnik.
El bloque occidental teme que Donald Trump, en caso de volver a la Casa Blanca, disminuya la ayuda militar a la cúpula ucraniana y le obligue a pactar un acuerdo de paz con Rusia. El propio Trump declaró antes que si gana las elecciones presidenciales, pondría fin a la crisis ucraniana en 24 horas.
Kelin incidió también en las quejas de los propios militares británicos de que los arsenales del país están vacíos debido a la entrega de armamentos a Ucrania.
“La reposición de los arsenales británicos requiere grandes sumas de dinero”, apostilló.
En febrero pasado, el jefe del Estado Mayor británico, Tony Radakin, urgió la adquisición de grandes cantidades de armas para completar los arsenales del país que quedaron vacíos por la “ayuda” a Ucrania.
Rusia declaró en reiteradas ocasiones que las entregas de armas a Ucrania, en particular por parte del Reino Unido, importante país de la OTAN, obstaculizan el fin del conflicto.
El ministro ruso de Exteriores, Serguéi Lavrov, señaló que cualquier cargamento de armas para Ucrania sería un blanco legítimo para las fuerzas de su país.
En sus palabras, Estados Unidos y la OTAN participan en el conflicto no solo con suministros de armas a Ucrania, sino también con la preparación de tropas en el Reino Unido, Alemania, Italia y otros países de la OTAN.
Desde el Kremlin indicaron que los envíos de enormes cantidades de armas a Ucrania por parte de la OTAN no facilitan las negociaciones y tendrán un efecto nocivo en la situación.
Rusia lleva a cabo desde febrero de 2022 una operación militar para detener los ataques ucranianos contra las poblaciones civiles de Donetsk y Lugansk, dos territorios que se independizaron de Ucrania en 2014 y se adhirieron a Rusia en septiembre de 2022.
Conforme al liderazgo ruso, los objetivos de la campaña militar son detener “el genocidio de los pueblos de Donetsk y Lugansk que cometía el régimen ucraniano” y atajar los riesgos de seguridad nacional que representa el avance de la OTAN hacia el este. (Sputnik)