elgrado, 17 abr (Sputnik).- Las autoridades de Serbia rindieron homenaje a los niños muertos a causa de los bombardeos de la OTAN sobre Yugoslavia, comunicó este miércoles el Ministerio serbio de Trabajo y Protección Social.
En la parte histórica de Belgrado se yergue un monumento a Milica Rakic, de 3 años, que murió el 17 de abril de 1999 alcanzada por una bomba de racimo de la OTAN. Se representa en una escultura de bronce con la inscripción “Sólo éramos niños”. El monumento se erigió en recuerdo a todos los niños serbios víctimas de la operación de la OTAN.
“Milica tendría ahora 28 años. Ella fue una de al menos 79 niños que perdieron la vida por la agresión de la OTAN”, dijo el ministro de Trabajo, Nikola Selakovic, quien junto con otras personalidades oficiales y ciudadanos colocó flores sobre la tumba de la niña.
Esta ceremonia se celebra todos los años para mostrar que “las víctimas no están olvidadas, que nosotros no hemos olvidado el mal que nos trajeron aquellos que quieren quitarnos Kosovo y Metojia”, agregó el ministro.
En 1999, la confrontación armada entre los separatistas albaneses del Ejército de Liberación de Kosovo y el Ejército y la policía serbios provocó los bombardeos de la OTAN contra Yugoslavia, integrada en aquel entonces por Serbia y Montenegro.
La operación se lanzó sin tener la aprobación por parte del Consejo de Seguridad de la ONU, basándose solo en las afirmaciones de los países occidentales de que las autoridades de Yugoslavia supuestamente organizaron unas limpiezas étnicas en la autonomía de Kosovo, provocando allí una catástrofe humanitaria.
Los bombardeos aéreos de la OTAN sobre Yugoslavia duraron desde el 24 de marzo y hasta el 10 de junio de 1999, causando la muerte a más de 2.500 personas, incluidos 87 niños, y un daño de 100.000 millones de dólares. Los médicos registraron consecuencias del uso por la OTAN del uranio empobrecido, lo que provocó el aumento de las enfermedades oncológicas. (Sputnik)