El presidente de EEUU, Joe Biden, dijo este jueves que el ejército de su país continuará con los bombardeos en Yemen, aunque reconoció que no están dando resultado en disuadir a los hutíes de seguir atacando a los buques que navegan por el mar Rojo.
«¿Los bombardeos están deteniendo a los hutíes? No. ¿Van a continuar? Sí», dijo el mandatario según el equipo de prensa de la Casa Blanca.
El movimiento Ansar Alá (hutíes), que controla una parte de Yemen, proclamó el 19 de noviembre que atacará cualquier barco relacionado con Israel, como respuesta a los ataques de ese país a la Franja de Gaza, e instó a otras naciones a retirar sus tripulaciones de esas embarcaciones y a no acercarse a ellas en el mar.
Desde entonces, según el Mando Central de Estados Unidos (Centcom), se registraron una treintena de ataques hutíes con drones, misiles antibuque y misiles de crucero contra barcos en el mar Rojo y el golfo de Adén, rutas marítimas clave para el comercio internacional.
En la noche del 11 al 12 de enero, EEUU y el Reino Unido lanzaron una oleada de ataques contra objetivos hutíes en cuatro gobernaciones de Yemen.
Los ataques, que contaron con el apoyo de Australia, Baréin, Canadá y Países Bajos, fueron dirigidos contra los puestos de mando, depósitos de municiones, sistemas de lanzamiento, instalaciones de producción y radares de defensa aérea y causaron al menos cinco muertos y seis heridos en las filas hutíes.
En los días siguientes, EEUU realizó otros ataques contra posiciones de los hutíes en Yemen.
Altos cargos del movimiento Ansar Alá sostienen que la agresión por parte de EEUU y sus aliados no disuadirá a los hutíes de atacar barcos vinculados a Israel mientras duran las hostilidades en la Franja de Gaza. (Sputnik)