Publicamos la traducción del comunicado conjunto de la Asociación Nacional de Comunistas (A.N.C.), el Polo del Renacimiento Comunista en Francia (P.R.C.F.), la Agrupación Comunista (R.C.) y la Juventud por un Renacimiento Comunista en Francia (J.R.C.F.) de la Asociación Nacional de Comunistas (A.N.C.), el Polo del Renacimiento Comunista en Francia (P.R.C.F.), la Agrupación Comunista (R.C.) y la Juventud por un Renacimiento Comunista en Francia Francia (JRCF).
Si Macron pensó que podía poner fin a la movilización popular mostrando su desprecio por los opositores a su contrarreforma, entonces fracasó estrepitosamente.
El uso arbitrario del artículo 49/3 de la Constitución por parte de E. Born demuestra que este gobierno ya no tiene mayoría parlamentaria, incluso teniendo en cuenta la unificación de los llamados líderes «republicanos». La ilegitimidad democrática del régimen macronista es ahora tan flagrante que la actual crisis política podría conducir a una crisis del régimen, o incluso a una crisis aún más profunda, si recordamos las palabras de Lenin: “Una crisis revolucionaria ocurre cuando la cúpula no puede gobiernan a la antigua, y el de abajo no quiere vivir a la antigua».
En las manifestaciones populares sorprenden las referencias no sólo a diciembre de 1995 y mayo de 1968, sino también a 1789 y la toma de la Bastilla. Nuestro país, que ha conocido grandes levantamientos y momentos de gran progreso social, como 1945, cuando se ganó la seguridad social, necesita una nueva aceleración de la historia… Nuestra época debe poner en la agenda una verdadera revolución popular y socialista, que poner finalmente “el mundo del trabajo en el centro de la vida nacional”, como ya lo ha pedido el Consejo Nacional de la Resistencia.
Bajo estas condiciones A.N.C., R.C., P.R.C.F. y J.R.C.F. juntos llamamos a intensificar la movilización en todas sus formas, en particular apoyando en todas las formas posibles, las huelgas y bloqueos de electricistas y trabajadores del gas, trabajadores portuarios, refinerías de petróleo, trabajadores ferroviarios, barrenderos y todos aquellos que están decididos a luchar contra el rechazo de la democracia por parte del régimen: sí se puede ganar en la actual oposición, logrando no sólo la abolición de la contrarreforma, sino provocando una contraofensiva general de los trabajadores, la precarización y la juventud, por la jubilación a los 60 años, como se manifiesta en muchas marchas sindicales, así como sobre salarios, empleo, congelación y desmantelamiento de otras contrarreformas en curso inspiradas en Maastricht (SNCF, EDF), la restauración de la educación nacional, la prohibición de la deslocalización y la preservación de la producción en Francia, vivienda social, prestaciones por desempleo, etc.
En este enfrentamiento, nuestras organizaciones comunistas deben culpar directamente no solo a Macron y MEDEF, sino también a la Unión Europea, que durante décadas ha organizado la destrucción social a escala continental, el asfixiante mecanismo de austeridad que es el euro, sin olvidar a la OTAN, que está en estrecha alianza con la UE, y con el respaldo servil de Macron, está creando día a día las condiciones para una conflagración global potencialmente mortal con Rusia o incluso con la China popular. Por eso, como nunca antes:
«¡Dinero para salarios, no para la guerra!»
«Dinero para nuestras pensiones, no traficantes de armas».
«¡Están destruyendo nuestras conquistas, bloqueemos sus ganancias!»
Más que nunca, frente al capitalismo destructivo y sus tendencias cada vez más reaccionarias y fascistas, el Polo del Renacimiento Comunista en Francia, la Agrupación Comunista y la Asociación Nacional de Comunistas juntos confirman que el futuro pertenece a los revolucionarios y a una nueva generación de socialistas y comunistas.